¿Ir de ruta a Budapest?

En 2011 la empresa Parapark abrió en Budapest el primer escape room de Europa. Fue la primera ciudad europea donde se desarrolló el fenómeno, pero a pesar de ello no ha seguido el ritmo de otros lugares. Si estás por Budapest hay algún juego que puede ser interesante, pero ¿ir de ruta a Budapest? La respuesta rápida sería “No”.

En diciembre de 2018, tras hacer una investigación previa, nos llamó la atención que los juegos considerados como top en las fuentes consultadas tenían más de 3 años de antigüedad. Además, uno de ellos ya lo habíamos jugado en Madrid, Heaven and Hell (nos comunicamos con la empresa de Budapest para confirmar que era el mismo juego), y nos había parecido un juego decente sin más. Decidimos reservar dos salas (una de las top en las reviews, Pirate Cave, y una nueva, Santa Muerte) y luego preguntar allí a los game masters por otras. Quizá no tuvimos mucha suerte, pero apenas nos supieron recomendar, no parecía que estuvieran muy al tanto de otras salas. Esto nos sorprendió bastante, ya que en España, debido al importante desarrollo del sector, los profesionales suelen estar muy actualizados. Así que buscamos de nuevo en internet y jugamos otra sala más (Karib Tenger Kalózai). Fue más de lo mismo y decidimos aprovechar el resto de nuestro tiempo en los encantos de la ciudad.

De vuelta en Budapest en diciembre de 2019, fuimos a jugar una sala que nos habían recomendado (The Time Machine), y como teníamos tiempo jugamos otra sala de la misma empresa (Kocka Cube). Si bien hemos de decir que la primera nos sorprendió para bien y nos dejó muy satisfechos, la segunda nos decepcionó.

Budapest cuenta con más de 100 salas, un número muy decente. Sin embargo, en general, son muy clásicas, simples, y con ambientaciones entre decentes y pobres. Vimos algún mecanismo ingenioso, aunque siempre muy casero. Se pueden encontrar escape rooms que llaman “3.0” (sin candados, todo mecanismos), pero en nuestra experiencia las pruebas plantean simplemente tareas y poco reto mental. Las introducciones no son directas al juego y el papel de los game masters no es integrado en la historia. Los juegos resultan muy poco inmersivos. Comparativamente, la gran mayoría no superan un juego mediocre en España. Hay que reconocer que algunas salas tienen mérito si se tiene en cuenta lo antiguas que son, pero las salas nuevas no parecen haber evolucionado. Una cosa buena es que no hay problema para jugar en inglés, simplemente hay que avisarlo al reservar.

Es cierto que podemos decir que hemos jugado en la cuna de los escape rooms en Europa. Pero desde luego no recomendamos Budapest como destino de ruta. Y en caso de estar de turismo por Budapest, excepto The Time Machine, no existe ninguna otra sala que justifique sacrificar cualquiera de los muchos encantos que tiene la ciudad… ¡En eso Budapest sí es top!